El tema de la corrupción y la deuda pública se asemeja al mito del monstruo de mil cabezas, le cortaban una y crecían más; tal ocurre con el asunto de la deuda con proveedores pues al revisar por dependencia en cada una surgen más adeudos, o bien se descubre que estos benefician a empresas de familiares y amigos sin la contraprestación correspondiente. Así se ha comprobado en las cuentas de la Secretaría de Desarrollo Social, en la Secretaría de Medio Ambiente y la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas. Sin duda, es acertada la estrategia para auditar una a una la entrega recepción, y aun así algunos podrían librarla pero está dando resultado y pronto se informará de la recuperación de otros cientos de millones de pesos productos del “vomito negro”.