Google Maps fue hackeado y los expertos en ese arte etiquetaron la localización del Palacio de San Lázaro como “Cámara de ratas”, lo que en términos populares provoca risa, pero ya fuera del solaz coloquio debiera producir vergüenza el que se tenga a los representantes llamados “populares” en tan baja estima. Ojala los señores diputados se esforzaran por cambiar esa deplorable imagen que de ellos tiene la sociedad mexicana; aunque hay algunos que se lo han ganado a pulso.