Nuestra democracia resulta bastante cara, los partidos políticos resultan muy caros y su desprestigio no avala el dinero que se les destina en prerrogativas. Por ese motivo es interesante la propuesta del senador Lavalle para reducir a la mitad el dinero que se les destina, u los obligaría a apretarse el cinturón. Propone reducir en 50% los presupuestos de los partidos políticos, “del INE, de todos los organismos autónomos…” dice el senador en sustento de su propuesta. Ojala fuera posible porque provoca indignación saber que aun después de desaparecido el Partido Cardenista recibirá prerrogativas correspondientes a octubre y noviembre pasados, según acuerdo de los magistrados del Tribunal Electoral de Veracruz (TEV), lo peor sería que también el AVE contara con esa prebenda.
