- El músico originario de Chihuahua es profesor en el Berklee College de Boston desde hace 33 años
Víctor Mendoza, durante la clase maestra ofrecida en la Casa del Lago UV
Jorge Vázquez Pacheco
26/10/2017, Xalapa, Ver.- Víctor Mendoza, profesor en el Berklee College de Boston, comentó en torno de la técnica de interpretación sobre el vibráfono y mencionó que no es suficiente con saberse la pieza sino es necesario conocerla, lo cual es aplicable para todo músico de jazz.
Durante la clase maestra que impartió en la Casa del Lago de la Universidad Veracruzana (UV), el miércoles 25 de octubre como parte del 8º Festival Internacional Jazzuv, aconsejó estudiar las Partitas para violín solo de Johann Sebastian Bach sobre el vibráfono. “Eso es excelente porque todo lo ves escrito, puedes analizarlo y tratar de comprender cada una de sus frases. Lo que buscamos es cantar con nuestro instrumento, no simplemente hacerlo sonar”.
Originario de Chihuahua e hijo de un músico que dominaba en la guitarra prácticamente todo estilo y formas de interpretación, Mendoza fue el primer mexicano que se sumó a la plantilla académica del Berklee College de Boston y apenas el segundo latino. “Me considero un mexicano exitoso, contrario a lo que Donald Trump piensa de nosotros. Hago lo que me gusta y me pagan por ello”.
En la Casa del Lago, el vibrafonista impartió no sólo una cátedra sobre su instrumento, fue también una conferencia de gran interés para músicos y melómanos.
Comentó que el vibráfono es un instrumento relativamente nuevo en la música, a diferencia del piano o el violín, de modo que es comprensible que aún no existan muchos ejecutantes en Xalapa.
Al presentar un fragmento a la manera de Lionel Hampton, mostró la forma de obtener la textura deseada y lo mucho que hay por aprender en torno del empleo de las baquetas y del pedal. “No es lo mismo usar baquetas duras que blandas, el rango de dinámica tiende a limitarse o ampliarse de acuerdo a las características de las mismas. Las blandas son recomendables para obtener una mejor riqueza tímbrica”.
Del mismo modo, ejemplificó acerca de la escasa conveniencia de golpear con fuerza sobre el teclado para el logro de la expresividad deseada. “Esto tiene un límite en el volumen, no le vas a sacar más golpeando con más fuerza. Como en la batería, hay que mover las manos no por el poderío sino por la emoción; tienes que ser muy claro en lo que deseas”.
La clase de Víctor Mendoza se prolongó por más de una hora y los asistentes tuvieron la oportunidad de verle tocar el teclado del piano.