En El Universal de este día Carlos Loret de Mola escribe acerca de la captura de mandos policiales acusados de la desaparición de personas: “… Por el peso político de Duarte, será un misil al Partido Revolucionario Institucional en plena campaña presidencial, con los atentos saludos del Frente Partido Acción Nacional-Partido de la Revolución Democrática. Un testimonio clave para armarlo podría ser el de Arturo Bermúdez Zurita. Él fue secretario de Seguridad Pública de Duarte y amasó una fortuna que según las acusaciones le permitió ser dueño de bares y restaurantes en las más cotizadas playas de Quintana Roo. Está en la cárcel por los escándalos de corrupción: le imputaron tráfico de influencias, abuso de autoridad y enriquecimiento ilícito. […]. También aparece como parte de esta presunta estructura institucional para las desapariciones forzadas quien fuera director de las cárceles del estado, Óscar Sánchez Tirado, aprehendido por presuntamente haber asesinado al novio de su pareja y haberlo enterrado en un rancho…. Será cosa de semanas para saber si se cuece este arroz que ya están cocinando… a la veracruzana”.