Cuando Amalia García salió del gobierno de Zacatecas, su sucesor en el cargo difundió casos de manejos irregulares de los recursos públicos durante el mandato de doña Amalia, quien se mantuvo ocupada durante un buen tiempo aclarando sus cuentas, y aunque nada ocurrió aparte del encarcelamiento de algunos de sus ex colaboradores ella superó el trance. En aquel entonces sus amigos del PRD cabildearon para apoyarla, pero ahora que ella los cambia por AMLO, deja el PRD y se va a MoReNa, le reactivan el resultado de una auditoría al manejo del Programa de Desempleo en el gobierno de la CDMX donde encontraron un desvío de 60 millones de pesos de cuya aplicación doña Amalia tendría que rendir cuentas. Pero, ¿por qué no la denunciaron antes? no que sea inocente o culpable, pero apunta a una complicidad generalizada y ratifica la consigna juarista “a los amigos justicia y gracia, a los enemigos justicia”.