El discurso de AMLO avisa de un cambio en la actitud del nuevo servidor público, y de quienes lo acompañarán para implementar el proyecto de la Cuarta Transformación teniendo como guía de conducta la honestidad y la eficiencia. En Veracruz, Cuitláhuac García tiene similar discurso e idénticos propósitos, hasta allí todo va bien. Sin embargo, si bien los propósitos son halagüeños y se encaminan hacia el bien común, habrá que ver cómo asimilan los nuevos funcionarios el impacto de su relación con el Poder, de venir del anonimato a los reflectores de la adulación y las franquicias que otorga el cargo. Ese es un reto frente al cual AMLO, Cuitláhuac, ni otro con poder humano hasta el momento habrán podido eludir, pues ese fenómeno está en el ámbito de la condición humana.