Lo que en apariencia podría concebirse como un problema muy localizado, no será de esta manera si resultan ciertos los rumores sobre las supuestas fallas estructurales en el estacionamiento de Plaza Animas, pues desde el punto de vista económico sus efectos semejarían a una onda expansiva que afectaría a cientos de vecinos de esta ciudad capital. Porque no solo se trata de negocios que pudieran cerrar sus puertas, sino de la gente que en ellos trabaja y perderían su empleo, con el consiguiente impacto social en la ciudad y la región. Proveedores, inversionistas, base laboral, etc., sufrirían directamente las consecuencias. Ojala este diagnóstico no esté en lo cierto