Cuando presidente de México Calderón promovió foros sobre la construcción de una nueva refinería, se escogió Tula, en Hidalgo, sin embargo, quedó en proyecto. Ahora López Obrador anuncia que se construirá en Dos Bocas, Tabasco. Voces autorizadas como la de Federico Reyes Heroles, ex director de Pemex opina sobre las opciones: o cerca de la producción o cerca del mercado, pero se inclina por Tula porque “solo se necesita un oleoducto para traer el crudo a la refinería… pero si se pone junto a la producción se debe crear toda una red de distribución y sale muchísimo más caro”. La de Tula no se hizo por falta de dinero “de decisión y por limitaciones operativas de Pemex”. Y dejó la gran duda: “el presupuesto para 2019 es de 6 mil 300 millones de dólares para gastos de operación y 13 mil millones para inversión”, y recordó que en su gestión había 20 o 22 mil millones para inversión y 10 o 12 mil millones para operación” (Milenio). Lo cierto es que la nueva refinería en Dos Bocas, va.