Antes de su aprobación los diputados deben consultar con la historia y con quienes están al corriente del acontecer municipal veracruzano, porque la propuesta del gobernador Cuitláhuac García, recientemente remitida al Congreso local, autorizando a los ayuntamientos veracruzanos a contratar créditos bancarios camina en sentido contrario a la conveniencia pública. Cuando aquella controvertida bursatilización del 20 por ciento correspondiente a los municipios promovida por Fidel Herrera se argumentó que era “para conseguir recursos frescos” y adelantar la construcción de obra pública “¿para qué esperar si podemos avanzar en beneficio de los veracruzanos?” Parte de la abultada deuda municipal tiene ese origen y de obra pública nada. Es inexplicable la propuesta por un gobierno que proclama la anticorrupción como método administrativo ¿cómo va a controlar la aplicación del dinero así conseguido? Se duda lo haga porque no se advierten signos de poder hacerlo, y alguien en el Congreso debe alertar sobre las inconveniencias de esta propuesta.