Cuernavaca, Morelos, miércoles 10 abril 2019
MODERADORA: Señoras y señores, reciban la más cordial bienvenida al Centenario Luctuoso del General Emiliano Zapata Salazar.
Agradecemos la presencia de autoridades federales, estatales, municipales, sociedad civil y a los representantes de los medios de comunicación.
Se encuentra con nosotros la subsecretaria de Gobierno, Diana Álvarez Maury.
Secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde.
Doctora Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente de México.
Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
Secretario de Gobierno de Morelos, Pablo Ojeda Cárdenas.
Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Manuel Villalobos Arámbula.
Secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Román Meyer Falcón.
Secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero.
Secretario de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval.
Secretario de Marina, almirante José Rafael Ojeda Durán.
Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño.
Secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú.
Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón.
Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Josefa González Blanco Ortiz.
Secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín.
Presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo.
Director del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II.
Director general de la CFE, Manuel Bartlett Díaz.
Director general del Issste, Luis Antonio Ramírez.
Coordinador de Memoria Histórica y Cultural de México, Eduardo Villegas Mejías.
Directora general del DIF, María del Rocío García Pérez.
Senadora de la República por el estado de Morelos, Lucía Meza Guzmán.
Senador de la República por el estado de Morelos, Radamés Salazar Solorio.
Presidente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y del Caribe, Manuel de Jesús Pichardo Arias.
Magistrada presidenta del Honorable Tribunal Superior de Justicia del Estado de Morelos, licenciada María del Carmen Verónica Cuevas López.
Presidente municipal de Cuernavaca, Francisco Antonio Villalobos.
Presidente de la Mesa Directiva del Congreso del estado de Morelos, diputado Alfonso de Jesús Sotelo.
Bisnieta del general Emiliano Zapata, Lisseth Castro Zapata.
Secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval Ballesteros.
Coordinador General de Comunicación Social y Vocero del Gobierno de la República, Jesús Ramírez Cuevas.
Secretaria de Energía, Rocío Nahle García.
Jefe de la oficina de la gubernatura del estado de Morelos, José Manuel Sánz Rivera.
La presidenta del Sistema DIF Morelos, Natalia Rezende Moreira.
El gobernador constitucional del estado libre y soberano de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo.
Preside este importante evento conmemorativo el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.
Solicitamos respetuosamente a los asistentes ponerse de pie para llevar a cabo un minuto de silencio solemne para conmemorar el Centenario Luctuoso del General Emiliano Zapata Salazar.
(MINUTO DE SILENCIO)
MODERADORA: Solicitamos a los asistentes ocupar sus lugares.
A continuación, escuchemos las palabras de bienvenida a cargo del gobernador constitucional del estado libre y soberano de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo.
CUAUHTÉMOC BLANCO BRAVO, GOBERNADOR DE MORELOS: Buenas tardes.
Señor presidente:
Agradezco su presencia entre nosotros, le saludo con respeto a usted y a su distinguida esposa, a los integrantes de su gabinete.
Agradezco también la presencia de los senadores, diputados locales, diputados federales, autoridades civiles y militares, medios de comunicación aquí presentes.
Hoy, a cien años de su muerte, rendimos homenaje al hombre, al caudillo y mártir Emiliano Zapara Salazar, símbolo del agrarismo. Su legado de libertad, justicia y ley prevalece hoy en día como postulado que rige la lucha por alcanzar igualdad para las clases más desprotegidas y vulnerables.
Los invito a honrar la memoria del Caudillo del Sur y sin divisionismo trabajar para alcanzar el México que todos añoramos.
Señor presidente:
Reitero nuestro compromiso con su proyecto de nación y agradezco su cercanía con nuestro estado.
Morelos, como se lo he dicho, es su casa.
Muchísimas gracias.
MODERADORA: A continuación, queda en uso de la palabra el presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo.
PORFIRIO MUÑOZ LEDO, PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS:Ciudadano presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señor gobernador del estado, diputadas, senadoras, presidente municipal y, desde luego, distinguidísimos miembros del gabinete presidencial.
Acudimos de nuevo al santuario de la Revolución Mexicana sabiendo que nuestro mejor homenaje es la reflexión colectiva sobre su trayectoria, su sacrificio y sus ideales.
Emiliano Zapata es hoy un ícono sin fronteras. Ahí donde aparezca su imagen en cualquier rincón del mundo está el retrato simbólico del México profundo, un país marcado por la desigualdad ancestral y por luchas inacabables en favor de la justicia.
Reforma, libertad, justicia y ley fueron sus postulados en el plan libertador de los hijos de Morelos, conocido como Plan de Ayala.
Es también un enérgico reclamo contra el despojo que ha prevalecido desde la Conquista y en favor de los derechos históricos de los pueblos originales y de las comunidades agrarias, que fueron arrolladas por el liberalismo y el positivismo que importamos.
La única restitución de propiedad territorial que hemos tenido en nuestra historia y la única distribución efectiva de la riqueza y el ingreso ha sido la reforma agraria, finalmente ejecutada por el general Lázaro Cárdenas, quien llamaba a este sitio el venero de la guerrilla. Otorgar la custodia celosa de la tierras, territorios y recursos naturales a los campesinos, que no a las empresas mercantiles nacionales o extranjeras.
La Tercera Transformación del país desembocó en dos vertientes que finalmente confluyeron, reflejadas en la Constitución de 1917.
El momento en que se establece la soberana convención revolucionaria, después trasladada a Aguascalientes, es la síntesis misma que unifica el pensamiento de los dos bandos en contienda: el que encabezaban don Emiliano Zapata y Francisco Villa, y el que acaudillaba Venustiano Carranza.
Los primeros querían un nuevo constituyente, desvinculado de la carta de 1857, mientras los segundos buscaban restaurarla con reformas.
De ahí el título de nuestra Constitución, todavía dice Constitución de 1917, que enmienda y adiciona la de 1857. Ese fue el propósito.
Tenía, además, don Venustiano un gran aliento municipal más que federal, en tanto la reunión convencionista y su concepto del poder eran parlamentaristas; textualmente, claro, era concepción arriba de lo que era la comunidad agraria.
En Venustiano Carranza hay un gran celo presidencialista como método para unificar un país dividido.
El punto de encuentro entre los dos proyectos de Constitución son los artículos 27 y 123, introducidas por el ingeniero Pastor Rouaix, en ambos textos.
La historia confluye, generalmente, en síntesis, válidas en la medida que reflejan las realidades y aspiraciones de un pueblo en un tiempo determinado.
Por ello, hemos llegado hoy a una cuarta etapa de la transformación nacional, que habrá de confluir en una síntesis de la realidad de nuestro tiempo y de la voluntad popular.
Este es el mejor homenaje que podamos rendir al general Zapata.
Todos los problemas de entonces dependían de la concentración de la tierra, como los de ahora derivan de la concentración de la riqueza.
El gobierno de la República ha decidido consagrar este año a la memoria del general Zapata, pudo haberle dedicado un siglo.
¡Zapata vive, su lucha sigue!
¡Zapata vive, su lucha sigue!
¡Zapata vive, su lucha sigue!
MODERADORA: A continuación, escuchemos la intervención de Lisseth Castro Zapata, bisnieta del general Emiliano Zapata.
LISSETH CASTRO ZAPATA, BISNIETA DEL GENERAL EMILIANO ZAPATA: Señor presidente de la Republica; señor gobernador del estado de Morelos; apreciable presídium; señoras y señores:
Tengo la esperanza de que mis palabras expresen el sentir de mis compañeros, los campesinos, de que mi voz refleje sus anhelos que por mucho tiempo han sido ignorados y, en algunos casos lamentables, acallados por la violencia.
Pero este 10 de abril nuestro propósito es conmemorar el Centenario Luctuoso del General Emiliano Zapata.
El motivo de esta ceremonia es recordar que un día como hoy, de hace cien años, fue asesinado en la Hacienda de Chinameca nuestro héroe del agrarismo.
En relación a su persona se han escrito numerosos libros, poco es lo que podemos agregar, pero sí pedimos, señor presidente, que en los planes de estudio de educación básica, en lo que se refiere a la materia de historia, se enfatice el contenido del Plan de Ayala, que los niños y los jóvenes de toda la República conozcan sus principios libertarios y de justicia.
También pedimos, señor presidente, que la documentación, los títulos originales de Anenecuilco, municipio de Ayala, que fueron la base de la lucha que emprendió mi bisabuelo, el señor Emiliano Zapata, sean preservados y difundidos a nivel nacional, para que así los campesinos de México conozcan la razón agraria más importante en la historia de este país.
Señor presidente de la República:
Sabemos que en el año de 1521, fecha que señala la historia como la caída de la Gran Tenochtitlan, perdimos nuestras tierras, que pasaron al poder del imperio español, imperio que mediante cédulas reales nos otorgaba el permiso para explotar tierras que habían sido nuestras.
Fue hasta 1810 que don Miguel Hidalgo y Costilla, con su luminoso ideal de conseguir la independencia, llamó a todo el pueblo a secundar la lucha para conquistarla del imperio español, y los campesinos de aquella época ofrendaron su vida por la promesa de que la tierra volvería a ser nuestra.
Don José María Morelos y Pavón, con su lema: ‘Que la tierra vuelva a los naturales’, hizo que los siguieran multitud de campesinos, muchos de estos de esta tierra y que hoy llevan con orgullo su nombre, el inmortal Morelos.
Sin embargo, los campesinos no lograron que la tierra se les entregara en propiedad. Por ello, nuevamente en 1910, don Francisco I. Madero, en su Plan de San Luis, volvió a llamar a todos los mexicanos para derrocar con las armas en mano al dictador Porfirio Díaz, prometiendo en el mismo Plan de San Luis tierra a los campesinos.
Siguiendo estos principios el general Emiliano Zapata, en 1911, promulgó el Plan de Ayala, documento clave en la historia agraria de México, que condensa los anhelos de la clase campesina, que estableció que los pueblos recuperaran la tierra que les pertenecía y que la defendieran con las armas en la mano.
Eso era lo que querían y lo que necesitaban los campesinos de Morelos y de todo el país. Por esta razón lo siguieron, por esta razón lucharon hasta la muerte para conseguir la tierra y una vida digna.
Estamos en el siglo XXI y nosotros, el pueblo campesino, no somos dueños de la tierra, esta es la sencilla verdad, verdad que nosotros vivimos a diario.
Esta es la razón por la cual el ideal de Emiliano Zapata sigue vivo, porque los campesinos necesitan la tierra, necesitan la justicia, necesitan la libertad.
Tal y como lo dijera mi abuelo, don Mateo Zapata, estamos decididos a no dejar morir a Zapata.
Las viudas de los combatientes del Ejército Libertador del Sur, por mi conducto, expresan su deseo de que se les dignifique su pensión mensual. Eso sería un digno homenaje al jefe suriano, al Caudillo del Sur, que dio su vida por mejorar las condiciones de su pueblo y que en el Plan de Ayala se preocupó por proteger a las viudas y huérfanos de la revolución campesina.
Emiliano Zapata, nuestro jefe, está vivo y seguirá vigente en la vida pública de nuestro país, porque los principios por los que él luchó siguen muy arraigados en nuestro pueblo, que sigue organizándose y luchando en la búsqueda de la justicia social.
Muchas gracias.
MODERADORA: Señoras y señores, escuchemos el mensaje que nos dirige el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Morelos, de municipios, pueblos, comunidades del estado de Morelos:
El día de hoy recordamos a Emiliano Zapata a cien años de su asesinato y este acto es muy importante porque recordar a Zapata es recordar nuestra historia, el no olvidar de dónde venimos para saber a hacia dónde vamos.
En los últimos tiempos, durante el predominio de la política neoliberal o neoporfirista, se apostó, se promovió de manera deliberada el que se olvidara nuestra historia. Los días para recordar se convirtieron en puentes para vacacionar.
Nosotros estamos reivindicando a los héroes de nuestra historia, estamos recordando las tres transformaciones que ha habido en el México independiente, porque esto es la política verdadera, la auténtica: el conocer qué hicieron los dirigentes de nuestra nación en momentos decisivos, qué hicieron también y, sobre todo, nuestros antepasados, qué hizo el pueblo para enfrentar tiranías, para luchar por las libertades, por la justicia, por la democracia, por la soberanía.
No son pasajes o relatos abstractos que tengan que ver con la imaginación o mensajes que entran por un oído y salen por el otro.
No, es la esencia de nuestra nación, es algo fundamental, cómo Hidalgo, Morelos, los independentistas, luchan por sus ideales y por liberar a nuestro pueblo, cómo Hidalgo proclama la abolición de la esclavitud y lucha al mismo tiempo por la independencia.
Y suele pasar que se le recuerda más como el precursor del movimiento de Independencia y suele olvidarse que tanto él, como Morelos, luchaban también y sobre todo por la justicia.
Él proclamando la abolición de la esclavitud y Morelos diciendo, ‘que se modere la indigencia y la opulencia, que se eleve el salario del peón, que se eduque al hijo del campesino igual que al hijo del más rico hacendado, que se proteja al débil de los…
INTERVENCIÓN: (Inaudible)
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Sí, va a haber solución pronta. Va a haber solución. Siempre va a haber justicia en nuestro gobierno.
Decía Morelos: ‘Que haya tribunales que protejan al débil de los abusos que comete el fuerte’.
INTERVENCIÓN: (Inaudible)
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Sí, tienen que ponerse de acuerdo, dialogar al interior de las universidades porque son autónomas y tienen que buscar entre ustedes la solución justa y pacífica.
Va a haber solución, pero tienen ustedes que participar. Va a haber diálogo ahora mismo, terminando el acto platico con ustedes.
Decía yo que Hidalgo y Morelos lucharon también por la justicia y esa fue una gran transformación.
Cincuenta años después vino otra transformación importante, el movimiento de Reforma, porque se afianzó la dictadura de Santa Anna, respaldada por el conservadurismo.
Por eso el movimiento liberal, encabezado por Juárez, llevó a cabo una reforma y cuando los conservadores fueron al extranjero y trajeron a un príncipe, y nos invadió el ejército francés, nuestros héroes, estos hombres que parecían gigantes, supieron resistir y se restauró la República, y se consiguió la segunda independencia de México.
Y la tercera transformación, como lo hemos dicho muchas veces, y lo vamos a seguir repitiendo, fue la Revolución en 1910, porque Porfirio Díaz se mantuvo 34 años en la presidencia, se quitaron las libertades, se oprimió al pueblo, se estableció la esclavitud y se favoreció a una oligarquía que acaparó el poder económico, acaparó las tierras y desde luego que acaparó el poder.
Por eso surge el movimiento revolucionario, desde antes de 1910, no olvidar el papel tan importante de los hermanos Flores Magón, precursores de este movimiento, y de muchos otros dirigentes sociales.
No desdeñar también la participación de Francisco I. Madero, un hombre bueno, demócrata, que pensó que podía haber libertades en el país manteniendo el mismo orden político, sin apoyarse en el movimiento social, sin hacer alianzas con los que luchaban por la justicia y, de manera muy especial, con el movimiento que encabezaba Emiliano Zapata.
Hubo un momento al inicio, cuando triunfa la revolución maderista, que hay un acercamiento entre Madero y Zapata, y hay buen entendimiento, pero se esmeraron los que no querían la justicia social en separarlos y por circunstancias de distintas índoles, por distintas razones, no se logró ese acuerdo.
Madero se quedó sin base social y por eso fue victimado, asesinado de manera cobarde, el Apóstol de la Democracia.
Emiliano Zapata siguió luchando por la tierra, luchando por la justicia, nunca se doblegó. Hay muchas pruebas, muchos testimonios de su lealtad al pueblo, de su lealtad a los campesinos y de su honestidad. Un dirigente que no se vendió, que no traicionó.
Hablaba yo del momento, del tiempo en que se llevaron bien Madero y Zapata.
Madero, como era del norte, hacendado, no entendía bien lo que eran las comunidades agrarias del sur y del sureste. No actuaba de mala fe, es que son dos mundos distintos, México son muchos Méxicos, es un mosaico cultural, y no comprendió la importancia que tenía la tierra para los campesinos del sur.
Cuando se llevaban bien, y no se le estaba dando solución al problema agrario, a pesar de que en el artículo 3º del Plan de San Luis, se había hecho el compromiso de que al triunfo de la Revolución se iban a entregar, a restituir las tierras a los campesinos y pasaba el tiempo.
A Madero, que le tenía mucha simpatía en ese entonces a Zapata, se le ocurrió decirle -yo entiendo que no con el propósito de corromperlo, sino como algo ingenuo, natural-, se le ocurrió decirle: ‘General, el gobierno le va a reconocer los servicios que usted ha prestado a la Revolución, le va a entregar un rancho, una finca’.
La respuesta de Zapata fue fulminante, la respuesta fue: ‘Yo no fui a la Revolución para hacerme hacendado’.
Y así como esa, muchas otras cosas, hasta su muerte. Un hombre leal a sus ideales, a la justicia.
Esa es, considero, la enseñanza mayor de Emiliano Zapata: su lealtad a los principios, su lealtad a los campesinos, su lealtad a la causa de la justicia.
Por eso estamos aquí para recordar esa historia y, como aquí se mencionó, además de la reflexión, del análisis del momento actual y del compromiso de llevar a cabo la Cuarta Transformación de la vida pública de México, tener presente esos ideales y hacer el compromiso de no traicionarlos nunca, jamás, que actuemos como ellos, que los emulemos, que sigamos su ejemplo, de Hidalgo, de Morelos, de Juárez, de Ocampo, de Madero, de Villa, de Emiliano Zapata.
Ahí está el plan de gobierno, ahí está el camino a seguir, lo demás no sirve, es politiquería. No se puede ocupar un cargo sin perseguir un ideal de justicia, sin buscar una transformación. Sólo los corruptos, los ambiciosos vulgares, buscan los cargos para sacar provecho en lo personal.
El servidor público tiene que atender las demandas de justicia y por eso nos da mucho gusto estar aquí, quisimos venir todas y todos los que formamos el gobierno de la República para refrendar nuestro compromiso con la justicia.
No le vamos a fallar al pueblo de México, se van a quedar con las ganas los conservadores. No somos iguales.
Y vamos a acabar con el principal problema de México: la corrupción. Se va a acabar la corrupción, se va a desterrar la corrupción del país y se va a acabar con la impunidad. Me canso ganso.
Y por eso va a haber justicia, como ya se inició, como ya ha comenzado a verse.
Me llena de satisfacción poder decir aquí, en Morelos, que ya los adultos mayores de Morelos, cerca de 150 mil adultos mayores ya están recibiendo sus pensiones, que ya están recibiendo sus pensiones las personas con discapacidad, que ya están recibiendo sus becas los estudiantes de familias pobres, que ya están recibiendo sus apoyos los campesinos.
Y aquí anunció que el programa conocido como Procampo, que ahora se llama Producción para el Bienestar, que significa entregar una cantidad periódica, una cantidad cada determinado tiempo por cosecha, a los productores, ejidatarios, pequeños propietarios, comuneros, y que sólo se entregaba a los que se dedicaban al cultivo de básicos y en muchos casos ese programa se desviaba y atendía sólo a los grandes productores, ahora es para los pequeños, medianos productores de cultivos básicos, y ahora se agrega este apoyo también a todos los productores cañeros de Morelos y del país.
Vamos a seguir entregando apoyos a quien más lo necesita y lo vamos a seguir haciendo de manera directa, porque antes no se entregaba mucho, se entregaba poco, pero además que era poco lo que se destinaba del presupuesto para el desarrollo social se entregaba a través de intermediarios y no llegaba o llegaba con moche, con piquete de ojo.
Ahora el apoyo va a llegar directo desde la Tesorería de la Federación al beneficiario, nada de que ‘yo soy del Movimiento Campesino Independiente Emiliano Zapata o de la Antorcha Mundial, dame a mí el dinero y yo lo voy a entregar a la gente’. No, primo hermano, eso ya se acabó. Ahora va a ser directo.
No desaparecen, lo aclaro, los apoyos para Estancias Infantiles, pero les va a llegar de manera directa a las madres de familia, porque hicimos un censo y cobraban por 300 mil niños y solo existían 200 mil. Y eso ya no se puede seguir permitiendo.
No vamos a tolerar la corrupción ni arriba ni abajo, se acaba el huachicol arriba y el huachicol abajo y se pone por delante la honestidad como forma de vida y como forma de gobierno.
Termino agradeciendo a todas, a todos ustedes, por asistir a este acto, por recordar, por no olvidar, es para no olvidar, por eso este año se consagró, se dedicó a Emiliano Zapata Salazar, y así vamos a estar recordando a nuestros héroes.
Les agradezco mucho por asistir a este acto tan importante para recordar lo que fue el asesinato cobarde del gran dirigente campesino Emiliano Zapata Salazar.
Para nosotros, los dirigentes, los héroes de nuestra patria, no son como para los conservadores, ellos en todos los tiempos denigraron a los dirigentes sociales, a nuestros héroes.
A Hidalgo le llamaban demagogo, pero fíjense que cuando estaban excomulgando a Hidalgo les dijo: ‘Ustedes no saben de la justicia, el único Dios que tienen los oligarcas es el dinero’.
Humillaron mucho, denigraron al presidente Juárez, no lo bajaban de indio las mujeres fifís de ese entonces, cuando iban al baño decían: ‘Voy al Juárez’.
A Madero lo trataron de loco, estoy hablando del pensamiento conservador, al grado que su abuelo, que era porfirista, le escribió a Porfirio Díaz disculpándose de lo que hacía su nieto.
Escribió don Evaristo Madero, a Porfirio Díaz diciéndole, ‘imagínese este joven que nos avergüenza a todos, imagínense que es hasta espiritista’. El mismo abuelo.
¿Cómo denigraban a Villa, a Zapata?
Los trataban de bandidos.
Ese es el pensamiento conservador, para nosotros son nuestros héroes, son los padres de nuestra patria. Esa es otra diferencia que tenemos con nuestros adversarios, tenemos un pensamiento distinto.
Qué bien que haya esta pluralidad, esta diversidad, esta distinta manera de pensar, pero que nosotros sigamos sintiéndolos orgullosos de lo que hicieron en su momento nuestros héroes, nuestros dirigentes. Y los vamos a seguir recordando.
Volvemos a hacer homenajes desde el Grito de Independencia en la noche, el 16 de Septiembre.
Y desde luego vamos a conmemorar, vamos a celebrar lo que fue la Revolución mexicana el 20 de Noviembre.
Y la memoria histórica va a estar siempre presente, siempre va a tener su lugar especial en la Cuarta Transformación.
Me dio mucho gusto estar con ustedes.
Muchas gracias de todo corazón, amigas y amigos.
El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, desde Cuernavaca, Morelos.