De resolutiva, rectificadora, redistributiva, legal y hasta de ridícula podría catalogarse la noticia difundida por la Secretaría de Salud del gobierno veracruzano dando a conocer que el gobierno anterior distribuyó 68 ambulancias entre municipios cuyos alcaldes militan en el PAN o en el PRD. Informa la Secretaría que esas unidades fueron enviadas a la entidad para destinarse a centros de salud y hospitales de la entidad pues fueron adquiridas con recursos del Seguro Popular. De haber sido como se informa hizo muy mal el gobierno de Yunes Linares por haber procedido privilegiando motivaciones políticas y de ser el caso proceder a aplicar las sanciones correspondientes. Lo chusco de este caso consiste en que la Secretaría aún no ha solicitado la devolución de esas ambulancias, es decir, en vez de corregir de inmediato, primero acude al golpeteo político.