Cuando transcurrido el tiempo, ya desde la perspectiva de la historia se analiza y evalúa un periodo de gobierno cuesta trabajo recordar quienes ocuparon las diferentes dependencias del equipo de gobierno, obviamente no ocurre igual con el nombre del gobernador, sobre quien gravita todo el peso de su responsabilidad, esta es una de las razones por las cuales él decide quién y hasta cuando lo acompaña en el juego, de cualquier manera cual sea el resultado el árbitro popular juzgará según el resultado. Así que por el bien de Veracruz ojalá los colaboradores de Cuitláhuac se pongan a trabajar en serio y que el gobernador evalúe, al margen de la muy cuestionada contraloría, el trabajo de uno de sus colaboradores. Finalmente, el pueblo, señor y juez de sus gobernantes, dirá la última palabra.