Paul Grisham, hoy de 91 años, dejó su billetera en el gélido destino donde era meteorólogo hace medio siglo. Unos detectives aficionados la recuperaron.
Lea el artículo en el New York Times
Paul Grisham, hoy de 91 años, dejó su billetera en el gélido destino donde era meteorólogo hace medio siglo. Unos detectives aficionados la recuperaron.
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