- Fabiola García, académica de la Universidad Autónoma de Querétaro, habló sobre el tema en el Seminario Conjunto de Cuerpos Académicos “Temas actuales de psicología, neurociencias y educación”
Fabiola García, coordinadora del Diplomado en Aprendizajes a través de Juegos Dirigidos, de la UAQ, impartió la conferencia
David Sandoval Rodríguez
09/09/2021, Xalapa, Ver.- La terapia de neuroretroalimentación (NRA), también conocida como neurofeedback, ha demostrado ser efectiva en modificar las conductas en niños con déficit de atención y trastornos de aprendizaje, señaló Fabiola García Martínez, coordinadora del Diplomado en Aprendizajes a través de Juegos Dirigidos, de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
La investigadora impartió una charla dentro del Seminario Conjunto de Cuerpos Académicos “Temas actuales de psicología, neurociencias y educación”, en el que participa la Universidad Veracruzana (UV), a través del cuerpo académico (CA) Psicología, Desarrollo, Salud y Educación, adscrito a la Facultad de Psicología.
“La terapia de NRA es un procedimiento de condicionamiento operante mediante el cual el individuo –con una guía adecuada– puede aprender a modificar la actividad eléctrica de su propio cerebro y así reducir o eliminar dificultades conductuales que obstaculicen su adaptación al entorno”, precisó la ponente.
Comentó que este tratamiento es una oportunidad terapéutica para mejorar la salud mental y la calidad de vida, “por lo cual se hace necesario seguir aportando al desarrollo de conocimientos que posibiliten mejores prácticas al brindar el servicio terapéutico, desde un acercamiento humanizado hacia el paciente, que posibilite mejores niveles de satisfacción en el trato recibido, mejor adherencia al tratamiento y, en consecuencia, mejores resultados”.
La terapia de NRA convoca a tener una mirada interdisciplinaria entre teoría, aplicaciones prácticas e investigaciones en el campo de la psicología, las neurociencias y la educación, afirmó.
“Es una oportunidad de apostar por la integración de nuevos conocimientos que hagan replantearnos nuestros objetivos de estudio; también podemos cuestionar nuestras metodologías de enseñanza, podemos incluir apoyos interactivos y las tecnologías, así como dar una mayor participación a los estudiantes y la sociedad en general.”
La investigadora destacó la importancia del aprendizaje como un proceso integral y continuo del ser humano
Recordó que el proceso de aprendizaje involucra numerosos aspectos biológicos y psicológicos, además de las situaciones del entorno social. “Hoy sabemos que el ser humano es una unidad compleja y que el proceso de aprendizaje involucra muchos aspectos, además de las situaciones del entorno social, por ello es una respuesta biopsicosocial que nos permite adaptarnos y gracias al aprendizaje podemos sobrevivir”.
García Martínez planteó que todas las terapias de NRA buscan tres objetivos: adquirir el control, mantener el autocontrol y conseguir la generalización y mantenimiento del autocontrol aprendido.
Se busca que este nuevo estado de la actividad eléctrica general se mantenga como regular en el funcionamiento de la persona, por tal motivo se considera a la NRA como una intervención que permite regular nuestros procesos electroencefalográficos, precisó.
La académica destacó que esta terapia ha mostrado tener beneficios, principalmente en pacientes con epilepsia –con quienes se iniciaron este tipo de trabajos–, también en el trastorno por déficit de atención, trastorno de aprendizaje, discapacidad intelectual, trastorno del espectro autista, trastornos de la conducta, tratamientos de depresión y del desorden obsesivo compulsivo, ansiedad, estrés y tratamiento de las adicciones, principalmente el alcoholismo.
Entre los efectos positivos reportados con el uso de la NRA, se cuentan mejorías en el alertamiento e incremento de la motivación, una habilidad para cambiar el estado de activación de forma voluntaria y otros factores como la mejora en el nivel de alertamiento y las funciones ejecutivas superiores en términos generales.
La académica reconoció que es un campo que requiere de mayor investigación y estudios sobre los cambios funcionales del sistema nervioso, al igual que evaluaciones más integrales y complejas de las distintas habilidades cognitivas de la persona.
Gloria Avecilla Ramírez, investigadora del CA Psicología del Aprendizaje y Praxis Educativa, también de la UAQ, presentó a la ponente y recordó que se otorgará constancia de asistencia a las personas que cubran el 80 por ciento de las sesiones virtuales, que pueden seguirse por https://www.facebook.com/cognicionactiva.
Señaló que la terapia de NRA genera cambios conductuales a largo plazo en niños con problemas de aprendizaje