- Mediante las investigaciones y reflexiones, los especialistas han aclarado las diferencias físicas y genéticas de las personas, enfatizó Carlos Serrano, investigador de la UNAM
- Dictó la conferencia magistral e inaugural del curso “Bioarqueología y antropología forense: metodologías básicas”
Carlos Serrano habló sobre antropología física, enfocada a estudios poblacionales y forenses
Texto y fotos: Paola Cortés Pérez
30/04/2023, Xalapa, Ver.- La antropología física aporta elementos para tener una visión amplia del fenómeno humano y para una mejor convivencia social al aclarar el significado de las diferencias físicas y genéticas de las personas, enfatizó Carlos Serrano Sánchez, investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El académico dictó la conferencia magistral “La antropología física contemporánea: estudios poblacionales y de orientación forense”, como parte del inicio de las actividades del curso “Bioarqueología y antropología forense: metodologías básicas”, realizado por el Instituto de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV).
Después de más de 100 años, la antropología física es una disciplina consolidada y con un progreso relevante: ha desarrollado sus planteamientos teóricos y metodológicos, además se ha abierto a nuevos tópicos de aplicación del conocimiento, expresó.
Mientras la antropología estudia la diversidad de la especie humana y de sus diferentes expresiones. La antropología física se enfoca en la variedad biológica de las poblaciones humanas a través del tiempo y espacio; sus dos principales temáticas son: paleoantropología y bioantropología de poblaciones contemporáneas.
“Es cierto que la antropología ha vivido muchas crisis, pero han sido de crecimiento, de innovación y reflexión para alcanzar nuevas metas.”
Algunas de las innovaciones de las que se ha servido la disciplina son la secuenciación del ADN (incluidos restos óseos antiguos); técnicas imagenológicas como la tomografía axial computarizada; morfometría geométrica; análisis físicos (microscopía electrónica o espectrometría) y modelización. Son parte de la revolución que está dándose para explicar la variación genética y la diversificación física, que es un fenómeno natural.
“La diversidad física en el mundo se aprecia a través de las variaciones somáticas; patrones de crecimiento infantil; variación intrapoblacional de la estructura corporal; tipología sanguínea, y marcadores genéticos (dermatoglifos). Estos elementos nos ayudan al estudio de la estructura genética de una población humana.”
Los estudios han ayudado a aclarar el significado de las diferencias físicas y genéticas de la población
Carlos Serrano destacó que la antropología física aporta elementos para una mejor convivencia social y reflexiona sobre la manera en que la sociedad percibe el fenómeno de la diversidad física de los humanos, situación relacionada con el racismo y la xenofobia resultado del eurocentrismo surgido en el siglo XIX.
“En Europa, en el siglo XIX, se comenzó a trabajar la diversidad física de los seres humanos que tenía como trasfondo que lo europeo fuera lo superior y el resto de las culturas fueran inferiores; pese al avance científico, ésta idea aún perdura.”
Serrano Sánchez planteó que la humanidad tiene que ser vista desde su riqueza y diversidad, ya que todos comparten el mismo código genético y las diferencias observadas se deben a variantes de los genes distribuidos con distintas frecuencias en las poblaciones.
“Esto debe ser claro para todas las personas, de ahí la importancia de difundir el conocimiento de la antropología física, a fin de que no haya base para pensar que unos son mejores que otros, y con ello combatir el racismo y la xenofobia.”
Antropología forense
Con respecto a la antropología forense, Carlos Serrano explicó que es una rama de la osteología antropológica, enfocada al estudio para determinar edad, sexo, estatura, perfil físico y detección de huellas particulares o lesiones dejadas en hueso, que permitan reconstruir un individuo.
En materia forense ayuda a la identificación de restos cadavéricos o sujetos vivos
En el contexto arqueológico, esta disciplina ayuda en el estudio de enterramientos humanos –funerarios o no–; en la reconstrucción de la vida social e ideológica de los individuos; determinar indicadores de actividad ocupacional y de estrés –actividad cotidiana–; alteraciones intencionales de la morfología ósea y dental; dieta; características físicas y genéticas, así como edad y sexo.
Mediante análisis morfocomparativos, su aplicación en el proceso legal busca establecer la individualización e identificación de restos cadavéricos o sujetos vivos.
“El antropólogo forense interviene en la recolección de datos en el sitio de hallazgo de los restos cadavéricos, análisis detallado del material esquelético y testificación de los resultados ante el tribunal”, puntualizó el especialista de la UNAM.