- “El arte puede ser un método de intervención social en cuestiones de problemas de salud comunitaria”: Francesco Panico, integrante del núcleo académico básico del posgrado
Francesco Panico invitó a cursar la Maestría en Salud, Arte y Comunidad
Claudia Peralta Vázquez
14/03/19, Xalapa, Ver.- La Facultad de Psicología de la Universidad Veracruzana (UV) oferta desde 2017 la Maestría en Salud, Arte y Comunidad, que tiene la finalidad de formar profesionistas que a través del trabajo comunitario, el arte y la investigación planteen alternativas para la salud y el bienestar de las personas.
Francesco Panico, miembro del núcleo académico básico de este programa educativo (PE), exhortó a los egresados de licenciaturas de las áreas de Ciencias de la Salud, Artes y Humanidades, preferentemente, para que se registren en la convocatoria que se encuentra vigente desde el 20 de febrero y hasta el 23 de abril.
Dio a conocer que el posgrado se desarrolla con apoyo de expertos de la Universidad de Nantes, de Francia, ya que una de las expectativas a futuro es avanzar hacia la doble titulación y que el estudiante inscrito pueda conseguir un grado avalado por ambas instituciones.
Precisamente, una de sus características fundamentales es la movilidad de estudiantes y profesores, lo cual proyecta a la UV hacia escenarios internacionales.
Destacó que no sólo es un posgrado desarrollado en coordinación con una institución europea, sino que intenta acercar campos diferentes del conocimiento como la salud, el arte y la comunidad.
Lo anterior mediante proyectos que promuevan la salud entre la sociedad a través de herramientas artísticas relacionadas con la estética en general.
“Se trata de una maestría con fuertes tintas estéticas que manejamos como horizonte para construir nuestras metodologías y nuestro conocimiento sobre temas fundamentales para la sociedad, particularmente en la temática de salud.”
Además, la Maestría en Salud, Arte y Comunidad tiene la esperanza de cumplir con ciertas necesidades no atendidas de la sociedad y renovar el panorama de la ciencia incursionando en el terreno del arte, entendido como una manera de conocer el mundo.
Dicho PE también busca inculcar en los estudiantes que no se limiten únicamente en sus horizontes disciplinarios, sino que se abran a otras formas y metodologías de intervención social e interpretación de las mismas dinámicas sociales.
Panico explicó que en este caso el concepto de salud no sólo se limita al discurso sobre la enfermedad o cómo podemos resolver situaciones críticas de cierto grado patológico, sino que se relaciona más bien con la manera en que vivimos.
Incluso, cuando el individuo se encuentra en una situación difícil como estar enfermo y padecer de algo, ahí también se pueden generar condiciones para que la vida de esa persona continúe, pues muchas veces sucede que la enfermedad y la salud son arrinconadas a los espacios institucionales como hospitales o centros de salud.
En este caso, dijo, la salud se debe interpretar como un nivel de colaboración entre las personas, que les permite llevar una vida digna más allá de que en algún momento puedan padecer cierta enfermedad o patología que transforme su situación.
Asimismo, el vínculo con el arte se da en el sentido de que éste es una herramienta o método de intervención para que en las comunidades funcionen dinámicas positivas de salud.
“La salud es algo que siempre se relaciona con la comunidad, sin una colectividad fuerte no puede haber buenas prácticas de salud”.
Comentó el caso de una de las investigaciones realizadas por una alumna recién egresada de la primera generación, quien trabaja en una comunidad de Campeche desplazada tras una situación violenta, con el fin de generar un sentido de identidad y pertenencia mediante un ejercicio de mapeo comunitario a través del dibujo y herramientas artísticas.
Otro de los proyectos va encaminado al empleo de herramientas literarias o la narrativa para el diagnóstico de enfermedades en hospitales.
Éstos son ejemplos de cómo el arte puede ser un método de intervención social en cuestiones de problemas de salud comunitaria, empleado como una metodología y un referente para construir propios modelos de intervención social.
“No son modelos construidos sobre bases exclusivamente científicas, sino en una metodología estética.”
Finalmente, señaló que el campo laboral está orientado hacia el autoempleo o para impulsar proyectos de este tipo en centros de salud u hospitales.