La delegada nacional del PRI en Veracruz, Lorena Martínez, pronunció un discurso en el que convoca a su militancia a reconsiderar rumbos, de acuerdo a las circunstancias que viven el país y su partido; reconoce “que los graves errores de anterior administración (duartista) dañaron seriamente la imagen de Veracruz y lastimaron profundamente a los ciudadanos, obliga al PRI a replantear sus objetivos y mejorar el diálogo con la sociedad”. Este discurso es parecido sino el mismo que se escuchó desde el PRI en 2000 cuando perdió la presidencia y en 2006 cuando, otra vez, resultó perdedor y Roberto Madrazo advirtió que el PRI no estaba dialogando con la sociedad, que debía acercarse a los problemas del pueblo. Salvo que ahora sí haya aprendido la lección, con la lógica de la simulación no podrá levantarse.