Con la detención de Arturo Bermúdez como antes lo fue de Leonel Bustos, inicia la cuenta del rosario, como se desgrana la mazorca, y otros más seguirán ese camino. El Estado de Derecho lo presumimos todos y en consecuencia debemos atenernos a que la Fiscalía General, en representación de la sociedad, integre la documentación acusatoria con el debido esmero; quien acusa tiene que probar y quien se defiende tiene derecho a hacerlo con todos los argumentos jurídicos a su alcance. Según vox populi los señalados por el dedo son merecedores del castigo consignado en las leyes, el paquete de la Fiscalía consiste en demostrarlo.