Pbro. José Manuel Suazo Reyes
Director
Oficina de Comunicación Social
Arquidiócesis de Xalapa
El pasado 17 de julio, se llevó a cabo en la Ciudad de Coatzacoalcos LA PRIMERA
MESA DE ANÁLISIS ESTATAL para diseñar la Ruta por la Vida y la Familia en
Veracruz. Al encuentro asistieron más de 45 organizaciones de carácter estatal y
nacional que promueven el valor de la vida humana y la familia natural. La reunión fue
convocada por la Organización Sí vida, Sí Familia y sin duda fue un acontecimiento
histórico para Veracruz porque con ello se inicia un proceso muy importante que
aglutinará muchas voces.
Vale la pena decir que detrás de estas organizaciones hay miles de ciudadanos que
aman estos valores porque reconocen que la vida es un derecho fundamental que no
se negocia con nada ni nadie y que la familia es una institución milenaria que sostiene a
la sociedad; si fracturamos la familia, corremos el riesgo de dañar severamente a la
sociedad.
Estamos viviendo un contexto social y político sin precedentes, se perciben trampas y
fraudes constitucionales que agravian la institución del matrimonio natural y el valor de
la vida. Algunos diputados traicionan a los que los llevaron a una curul, dejando a un
lado los principios que los empoderaron y se han vuelto serviles de ideologías y de
algunos grupos minoritarios; no se puede traicionar de esa manera a la sociedad. Con
cierta facilidad y casi de una forma entreguista, se están orquestando algunas
iniciativas políticas que lastiman a la sociedad al pretender modificar la legislación para
vaciar de contenido la institución familiar y relativizar el valor de la vida.
La Ruta por la Vida y la Familia cristaliza un movimiento social que ya desde hace
varios años se ha expresado de forma civilizada y pacífica en las calles y ante los
legisladores con iniciativas estatales y federales. Se trata de un movimiento que cobra
fuerza en todo el Estado de Veracruz, sobre el tema de la vida, la educación, el
matrimonio y la familia natural. El empoderamiento y reclamo de los ciudadanos
organizados cada vez es más notable. Este movimiento lo integran padres de familia,
amas de casa, abogados, líderes sociales y religiosos, personas creyentes y no
creyentes, campesinos, maestros, doctores, ingenieros; empresarios y empleados
todos unidos por la familia y la vida.
Ha llamado poderosamente la atención la influencia o “coincidencia” de los asuntos que
se tratan en el famoso Tomo VII, del Plan Veracruzano de Desarrollo 2016-2018, “Punto
de arranque de una nueva era”, aprobado por el Congreso del Estado el 29 de
noviembre de 2016, se percibe a primera vista que es pieza clave en las políticas y
estrategias públicas que se están instrumentando en asuntos de LA VIDA, LA
EDUCACIÓN, EL MATRIMONIO Y LA FAMILIA, desde los 3 poderes de gobierno
(ejecutivo, legislativo y judicial). No podríamos hablar simplemente de coincidencias
gratuitas, más bien de una planeación que va más allá de dos años y que sienta las
bases para que el Estado se convierta en un continuo agresor de los valores que ahora
todavía lo sostienen.
Mediante presiones internacionales y grupos sostenidos por lobbies ideologizados se
pretende llevar a cabo un fraude constitucional pues se le da más valor a una alerta de
género que a una reforma constitucional. No se puede modificar una ley menor como
puede ser el código penal si no se modifica antes la Constitución. Ahora con el pretexto
de una “segunda alerta” de género se busca imponer políticas públicas antivida y
antifamilia. Están usando el miedo y el chantaje político para querer imponer sus
propósitos.
Antes que las “alertas de género” que no dejan de ser sólo recomendaciones, nos
preocupa la realidad de Veracruz: la pobreza lacerante, el endeudamiento público que
mantiene paralizado al Estado, la falta de respuesta a las necesidades más
apremiantes de la gente como la seguridad, la salud, la educación y el empleo. Esto si
es un verdadero problema que debemos atender. Parece que preocupa más qué es lo
que dirán del Estado allá afuera porque tendría 2 o más alertas que lo que sucede
dentro, los grandes problemas que han llevado al hartazgo, el malestar social y el
desencanto de algunos servidores públicos.
Felicitamos a todas estas organizaciones que en base a estas coincidencias en los
temas de la Vida, educación, Familia natural y matrimonio, defienden todos estos
valores y desmontan las falacias de la Ideología de género que busca colonizar e
imponerse en nuestro Estado. Todos queremos un Estado más próspero y saludable,
con instituciones sólidas y firmes.