Lo hizo Fox durante su campaña a la presidencia y lo imitó Alfredo del Mazo para llegar al gobierno del Estado de México al ofrecer un “Salario rosa” a las amas de casa de aquella entidad consistente en mil 200 pesos mensualmente. Un ofrecimiento de esa naturaleza es desorbitado y difícil de cumplir porque ningún presupuesto lo resistiría; por ese motivo ahora, ya en el gobierno, Del Mazo aclara que se dará ese beneficio solo a mujeres en condición de pobreza extrema, ¿a juicio de quién? De quien asegure que no hay pobreza, por supuesto. Este es el síndrome de todas las campañas, prometer no empobrece, cumplir es lo difícil. Aunque tendrán que cumplir aunque sea para 2018, porque es tiempo electoral.