La nostalgia priista registra anécdotas grabadas ya en la historia política de este país, desde el “tapado” y los “destapes”, el sobre lacrado, “el que se mueve no sale en la foto”, “la comalada sexenal de nuevos ricos”, aún las más “recientes” pasarelas de pre candidatos a la presidencia hasta el rítmico grito de “El PRI unido, jamás será vencido”, todo eso constituye el registro de toda la época de cuando el PRI era el partido hegemónico de México. Después vino la debacle del año 2000, un interregno de doce años que incluyó estadísticas impensadas, como haber descendido al tercer lugar en las preferencias en 2006. Si el Ave Fénix existe debe ser equivalente a la proeza priista en 2012 cuando regresó al poder presidencial. Los tiempos de hoy son de coyuntura ¿podrá el PRI conservar el poder o vendrá otra mega alternancia? En julio próximo se despejará la incógnita.