Como es fácil advertir, ninguna candidatura presidencial despierta tanta expectativa como la del PRI, las razones son obvias: desde 1946 gobernó este país de manera ininterrumpida, hasta el año 2000 cuando fue abatido por el PAN y volvió a caer en 2006, hasta el 2012 en que recuperó la presidencia de la república con Peña Nieto como candidato. Obviamente, la candidatura de MORENA, hoy por hoy el más competitivo de los partidos, no despierta expectación porque todo mundo sabe que será López Obrador, si este no dispone otra cosa, por supuesto. La candidatura del Frente Ciudadano está en veremos, debido a que la propia alianza pende de un hilo, aunque Ricardo Anaya la ha preparado cuidadosamente. En Fin, ya está Meade en el ruedo junto a López Obrador; esperan a Anaya o Mancera, sin olvidar a doña Margarita Zavala.