Sobre si el tránsito por esta dimensión ocupa poco o muchos años cada cual tendrá su opinión, lo cierto es que nadie escapa de la despedida definitiva, unos antes otros más tarde; pero a pesar de tratarse de una eventualidad inevitable duele cuando un ser querido, estimado, ha cumplido su ciclo y tiene que partir, entonces también inevitablemente causa pesar. Ahora ocurre con el destacado periodista Iván Fortuny, a quien  sus amigos reordarán con cariño y afecto ya cumplió su ciclo de vida; ya descansa, que sea en paz.