- Guerra, botín y fortuna, de Juan Ortiz, coeditado por la Editorial de la UV y El Colegio de Michoacán, se presentó en la 39 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería
Luis Fernando Granados y Juan Ortiz participaron en la 39 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería
05/03/2018, Xalapa, Ver.- Marcado por la historia como villano, estratega militar hábil para armar a la población y dividir a los opositores y astuto acumulador de fortunas, Félix María Calleja fue el motivo de una larga y profunda investigación que realizó Juan Ortiz Escamilla, del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales (IIHS) de la Universidad Veracruzana (UV), que plasmó en el libro Calleja. Guerra, botín y fortuna.
La coedición de la Editorial de la UV y El Colegio de Michoacán se presentó en la 39 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.
En el Auditorio 4, Luis Fernando Granados, también integrante del IIH-S de la UV, afirmó que Calleja es “el malo de los malos” que venció al ejército de Miguel Hidalgo e hizo la vida imposible a los ejércitos de Morelos.
Resaltó la investigación que realizó Juan Ortiz desde hace 20, años que inició con el estudio sobre las relaciones políticas de la Nueva España y la reacción contrainsurgente a partir de 1810, donde una de las piezas principales de la respuesta institucional y militar fue precisamente Félix María Calleja.
Granados resaltó el Plan Calleja (llamado así por Juan Ortiz) con el cual crea milicias en los pueblos para combatir con civiles a los insurgentes, lo que provocó una guerra civil. También destacó la información contenida en el libro que da cuenta de la inmensa fortuna que generó Calleja, primero como comandante anti-insurgente y después como virrey que, no obstante los obstáculos financieros en el siglo XIX, consiguió llevarse una fortuna a Valencia para convertirse en uno de los hombres más ricos de España.
Luis Fernando Granados señaló que el aporte significativo del libro es que nos presenta a Calleja, paradójicamente, como uno de los pocos virreyes que en verdad era novohispano, que fue el único virrey conservador nombrado por los liberales y le tocó aplicar las reformas liberales que se plasmaron en la Constitución de 1812.
Por su parte, Ortiz Escamilla explicó la importancia de estudiar a los antihéroes como Calleja, “sin incorporarlo al discurso y al análisis no entenderíamos lo que sucedió en 1810, nos faltaría la mitad de la historia. A través de la visión de los considerados malos podemos entender la lógica de la corrupción enquistada desde la época colonial”.
Juan Ortiz dijo que su interés es difundir lo que significa una guerra para la sociedad, “estudiar las guerras me permite entender lo que está pasando en nuestros días; por ejemplo, que en nuestros tiempos en una guerra de baja intensidad los que mueren principalmente son los jóvenes”.
Aseguró que el movimiento rebelde de 1810 no fue de independencia sino más bien fue una guerra civil que enfrentó a los pobres contra los ricos, y donde Calleja aprovechó las debilidades de los insurgentes para enfrentarlos entre sí.
Por otro lado, Calleja fue denunciado por corrupción, pero con su habilidad no le pudieron demostrar nada. Sin embargo, Ortiz Escamilla, en su investigación, encontró contratos de compra venta, escritura de bienes, cómo invirtió el dinero, los inventarios de bienes y la gran fortuna que acumuló.
Como moderador de la presentación estuvo Germán Martínez Aceves, de la Editorial UV.