- Fue la última gran ceremonia y fiesta porfiriana, aseguró Carla Zurián, investigadora del INAH
Carla Zurián de la Fuente, investigadora del INAH
José Luis Couttolenc Soto
01/06/18, Xalapa, Ver.- Carla Zurián de la Fuente, investigadora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ofreció la conferencia “El centenario de 1910: celebración y espacio público”, en el marco del Seminario de Historia Intelectual/Historia Cultural del Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales (IIH-S) de la Universidad Veracruzana (UV).
La también profesora del posgrado de Museología en la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía “Manuel del Castillo Negrete”, afirmó que a poco más de 200 años de la Independencia de México, la celebración del primer centenario –en 1910– que comprendió 50 días de festejos y que fue la última gran ceremonia y fiesta cívica del Porfiriato, sigue siendo una de las grandes ceremonias y fiestas oficiales que no ha tenido parangón.
En su charla, Zurián de la Fuente detalló que los festejos del primer centenario de la Independencia comprendieron parte de agosto, todo septiembre y una parte de octubre, estallando al mes siguiente la Revolución Mexicana; sin embargo, “ni las fiestas de 1921 ni las de 2010 se han acercado a las realizadas en 1910, porque éstas no fueron sólo una celebración diplomática, cívica y social, ya que dejaron testimonio y una serie de documentos que dan fe de que esa celebración no pasó inadvertida”.
Dijo que tanto la prensa, la radio, los pregones, las invitaciones y todo lo que incidía en la celebración, dejó a la Ciudad de México constructivamente completa, con una gran cantidad de edificios y todo un complejo historiográfico que es importante rememorar para conocer uno de los momentos inmediatos al estallido de la Revolución.
Señaló que la Ciudad de México actual es el trazo de la ciudad porfiriana, “con muchos edificios, con amplitud en las comunicaciones; es una traza estratégicamente construida”. Recordó que en esa época se construyeron muchos de los monumentos emblemáticos de la capital del país y que forman parte del atractivo turístico, además de que son puntos de reunión social, entre ellos el Ángel de la Independencia (Paseo de la Reforma), el hemiciclo a Juárez (Avenida Juárez) y el lago de Chapultepec.
Carla Zurián fundamentó el trabajo de investigación en documentos que se encuentran resguardados en el Archivo General de la Nación, otros se encuentran en el Archivo de la Ciudad de México; se documentó también en la bibliografía de los fondos reservados de diversas instituciones como el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto de Investigaciones “Doctor José María Luis Mora”.
Consideró que su trabajo no está incompleto, pero reconoció que también se le pueden incorporar los festejos que hubo en los estados y municipios del país, en donde hay un mercado, un hospital, una escuela y otros edificios con el nombre de “Centenario”, ya que las fiestas no se concretaron “a sólo adornar con florecitas las calles”.