La tradición del día de “los santos inocentes” instalada por la iglesia católica y readaptada por el ingenio popular para hacer más llevadera la vida pone en vigilia a todo mundo pues, ya advertido para no caer víctima de la broma, se pone alerta y, a la vez, imagina la travesura que hará al prójimo. Por esta moción colectiva se tomaron con mucha reserva cuáaato los edios difundían: el amparo a Winckler para no ser removido de su cargo, la declaración del gobernador Cuitláhuac García sobre la abstención de su gobierno de utilizar la fuerza pública contra quienes bloquean calles y carreteras, el “gasolinazo” disfrazado a partir del 1 de enero, la renuncia del alcalde xalapeño a implementar labores de seguridad para reincorporarlas a la Secretaría correspondiente, la ratificación de la prevención preventiva a Nemi Dib para seguir en arresto domiciliario, la permanencia del ex fiscal, Luís Ángel “N”, en Pacho Viejo por lo menos hasta el 14 de enero cuando se celebre una nueva audiencia sobre su caso, el aunucio de Manuel Huerta sobre los 900 millones de pesos para “el corrimiento” de las vías del ferrocarril transistmico, más los mil 700 millones de pesos para los Puertos de Coatzacoalcos y Salina Cruz. Todas, noticias de cierta trascendencia, pero que en un día como el de “los inocentes” fueron puestas en duda, como en “hasta no ver, no creer”.