Aunque reconocidos analistas en la materia, en base a las circunstancias económicas del país consideran poco recomendable para México la construcción de una nueva refinería, hasta hace algunas semanas la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, insistía que se construirá en Dos Bocas, Tabasco. Forma parte del Plan Nacional de Refinación, aunque no se conoce proyecto alguno y se duda pueda entrar en funcionamiento en tres años, como está anunciado. Sin embargo, como se están acomodando las condiciones económicas del país se duda prosiga esa intención, mucho menos la anunciada para Atasta, Campeche. El referido plan consiste en la rehabilitación de las refinerías de Minatitlán, Salamanca, Tula, Cadereyta, Madero y Salina Cruz e incluye la de Dos Bocas. Cuando esa etapa concluya, las refinerías procesarán 1 millón 863 mil barriles de crudo por día en 2022, obteniéndose 781 mil barriles de gasolina y 560 mil de diésel diariamente.