En sus memorias, el ex presidente López Portillo narra que mientras su Secretario de Hacienda, David Ibarra, le informaba de un serio déficit en las finanzas públicas, su Secretario de Programación, Miguel de la Madrid, le presentaba cifras optimistas. Algunos meses después de haber decidido su sucesión a favor de De la Madrid, la economía en el país entraba en severa crisis, que confirmaba el diagnóstico de Ibarra. Entonces, recordaba López Portillo, en cada reunión con su Gabinete Económico, parecía escuchar a Ibarra decirle: “Ya ve, se lo dije”. Se asemeja al caso de Coparmex, ahora que pide mesura al presidente López Obrador respecto de la construcción de la refinería de Dos Bocas por Pemex: “Las cosas pueden salir mal y por ello en Coparmex exhortamos al gobierno federal a hacer un alto en el camino y reconsiderar los riesgos que esta decisión implica para Pemex, para las finanzas públicas y para México”. Ojalá no haya un “se lo dije”.