Algo ha debido acontecer en Veracruz con la procuración de justicia que curiosamente quienes acompañaron a Duarte en la tarea de despojar a Veracruz están en libertad cuando ya se les había mantenido en buen recaudo, ¿a qué debiera atribuirse esa circunstancia? Abundan quienes lo endosan a complicidades inconfesables entre la autoridad y los indiciados para formular carpetas de información débilmente sustentadas. Así se percibe en vox populi y esos malandros están a punto de superar la fase legal de las acusaciones en su contra. Pero aún les queda el obstáculo mayor, la Fiscalía General, en donde ni De Antes, ni Tarek, ni Aguirre, ni Audirac y otros innombrables han encontrado forma de ensabanarse con la impunidad que aquí se les propició.