Después del discutido decreto expedido por el presidente de la república para dejar sin efecto la reforma educativa y enviada para su cumplimiento a tres de sus secretarios de despacho, ahora se produce un nuevo atentado contra el Estado de Derecho con la iniciación de las obras de lo que será la refinería de Dos Bocas sin contar con la autorización sobre impacto ambiental, según afirman desde el Centro Mexicano de Derecho Ambiental y Greenpace. De ser cierta esta expresión, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, le estaría ocultando al presidente la falta de ese expediente que en términos de la normatividad es preciso conseguir. Pero, en verdad ¿el presidente lo ignora?