En Veracruz no se requiere de los números oficiales para deducir la terrible incertidumbre de vida de su población porque día a día se reportan hechos de violencia en su territorio. Hace unos días el gobernador, en base a estadísticas difundidas por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, se ufanó que la incidencia delictiva iba en descenso. Sin embargo, omitió las dramáticas cifras que revelan un preocupante incremento de feminicidios en la entidad, tomando como referencia comparativa el primer cuatrimestre de 2019 respecto del mismo periodo en 2018. Veracruz, Xalapa, Orizaba, Córdoba y Papantla figuran con una incidencia elevada de feminicidios. Obviamente estas ciudades destacan por el mayor número de recurrencias, no significa que en otras regiones se salvan de la violencia e inseguridad públicas.