La información sobre una derrama económica de más de 3 mil millones de pesos en el primer semestre del presente año, generados por la actividad turística en la entidad veracruzana, por ningún motivo, circunstancia o razón debe quedar en simple nota periodística, antes bien requiere ser destacada por sus implicaciones: si se corresponde con la verdad, marca un importante precedente acerca de una muy eficiente promoción turística atribuible a los encargados del ramo en Veracruz; en cambio, si la realidad lo contradice, entonces será producto de un padecimiento serio de mitomanía incorregible, merecedor de cese inmediato. En este caso, corresponde a los prestadores de servicio turístico, con datos duros, confirmar o negar la información de doña Xóchitl, y al gobernador actuar en consecuencia, reconociendo o cesando, pues no sería para menos.