Adoptar la inteligencia artificial puede ayudarnos a crear un nuevo contrato social equitativo, pero solo si recordamos algo indispensable: qué es lo que nos hace humanos.
Lea el artículo en el New York Times
Adoptar la inteligencia artificial puede ayudarnos a crear un nuevo contrato social equitativo, pero solo si recordamos algo indispensable: qué es lo que nos hace humanos.
Lea el artículo en el New York Times