Es destacable y buena señal de voluntad de cambio la acción emprendida contra 19 policías pertenecientes al Mando Único de Medellín de Bravo por haber retenido objetos sustraídos de tiendas comerciales sin registrarlos en la bitácora correspondiente pues eran producto de la rapiña de fin de semana. En el fondo de este asunto subyace el descrédito de los cuerpos policiales de la entidad y revela la simulación de los anteriores responsables de la Seguridad Pública cuando ofrecían a Veracruz una policía confiable. ¿Qué destino tuvo el dinero para la capacitación y superación policiaca? Ahora comprobamos que fue un mal cuento cuando se festinaba la policía de “nueva generación” que tendríamos en Veracruz.