Apartándose del propósito original que el maestro Guillermo Zúñiga Martínez diseñó para la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, sus seguidores y presuntos amigos pervirtieron la institución al convertirla en jugoso y lucrativo botín, tal como lo revelan las investigaciones que se llevan a cabo al interior de esa Universidad. Que el Secretario de Educación Pública calificara como fraude educativo a la UPAV no es asunto menor, y pronto sabremos a detalle el monto de lo defraudado tanto en materia académica como en las ganancias multimillonarias que de algún modo estarán recuperándose.