En realidad la nota no es extraña: el diputado local, Rodrigo García Escalante, ha declarado su intención de demandar al ex priista Francisco Garrido, porque extorsiona a quienes pretenden candidaturas a alcaldías y regidurías. Si el asunto estuviera en otro tipo de protagonistas la contraparte demandaría por difamación y calumnias, pero todo quedará en un intercambio obsceno entre políticos cuya palabra está en descrédito. ¿Es cierto lo que asegura el diputado? Que presente pruebas; ¿es un infundio como lo señala Garrido? Que demande por difamación; pero todo este chisme quedará entre políticos, que viven de la política.