Hasta dónde será bueno que la economía mexicana ya no está petrolizada que lo expliquen los expertos en la materia, pero aún se recuerda la enorme dependencia de México respecto de las exportaciones petroleras que aportaban miles de millones de dólares a la economía nacional. Esa condición ha terminado para dar paso a los ingresos de divisas vía remesas de trabajadores mexicanos en el extranjero, pues en 2017 México recibió 28 mil 630 millones de dólares y superó los ingresos por inversión extranjera directa y los provenientes de las exportaciones petrolíferas que el año pasado sumaron 17 mil 652 millones de dólares. Tales números permiten darnos cuenta a cabalidad de las repercusiones en nuestro país de la política sobre la inmigración impulsada por Donald Trump.