Durante el debate Andrés Manuel López Obrador insistió en no contar con propiedad inmobiliaria y que de encontrarse alguna la obsequiaba, en este caso a José Antonio Meade quien le formuló la pregunta y ahora presenta pruebas de la existencia de esas propiedades en el registro público de la propiedad y espera que AMLO entregue dos departamentos. De reiterar esa demanda Meade incurriría en tremendo error pues arrimaría hacia el candidato de MoReNa más simpatías por aquello de que se está siempre con el más “débil”. Craso error no insistir más en la mentira implícita en la negativa de no tener propiedades que en la entrega de los departamentos, así fuera para donarlos a algún necesitado.