“Solo el que carga el bulto sabe lo que este pesa”, es el refrán aplicable a la CANIRAC en el caso de la aplicación de la Ley seca con motivo de los comicios del domingo próximo. Cada sector empresarial adopta el criterio a su conveniencia, porque mientras en la COPARMEX se inclinan por la aplicación de la Ley seca (porque por “algo” se legisló) los de la industria restaurantera se quejan amargamente porque les afecta en sus negocios reduciendo los márgenes de ganancia para ese día. Lo verdadero, lo cierto, lo real, es que con Ley seca o sin ella quien quiere echarse unos tragos entre pecho y espalda se avitualla de su licor favorito desde antes de la vigencia de esa ley y nada pasa porque en los actuales tiempos “borracho no come lumbre”.