Joaquín Rosendo Avilés tiene a su cargo la Secretaría de Desarrollo Agropecuario del gobierno veracruzano, su desempeño ha sido mediocre, toda una decepción para quienes le confiaron esa delicada responsabilidad. Su desinterés por resolver los problemas del campo veracruzano se trasluce claramente cuando niega la existencia del abigeato, a pesar de las continuas llamadas de auxilio de los ganaderos del norte, centro y sur de la entidad. El señor avilés se apega al eufemismo de mercadotecnia “si no se ve no existe”, alegando que el abigeato que no se denuncia no existe. Pero para los ganaderos veracruzanos ese robo constituye una grave pérdida económica y pone en evidencia tanto a la Fiscalía que no ofrece resultados como a la Sedarpa convertida en un elefante blanco en la presente administración.