En la primera semana de enero de 2017, iniciando apenas el segundo mes del gobierno de Yunes Linares, bandas delincuenciales provocaron saqueos en Centros Comerciales de Xalapa y la Ciudad de Veracruz; los vándalos se movilizaban en taxis y motocicletas, que el gobernador atribuía a la delincuencia organizada: “La policía cibernética es eficiente y detectó a quienes convocaron…”, anunció la cancelación de concesiones de taxis. “Ya tenemos una persona detenida que no solo convocó en Xalapa, sino que trasmitió en vivo el saqueo a la plaza de Xalapa y hay labores de inteligencia para ver si hay personas de tras o fueron hechos aislados”. Sin embargo, el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes sostenía otra versión, pues en su homilía del domingo nueve de enero de 2017, dijo: “Nos damos cuenta que muchas de estas cuestiones que se realizan de saqueos, de vandalismo, están organizados, vienen programados por otras instituciones, a veces, incluso, gubernamentales”. Después vino la calma, nadie más dijo nada. ¡Qué extraño!