Apenas 56.6 millones de pesos obtuvo el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) en la subasta de inmuebles arrebatados a miembros de la delincuencia, cuando esperaba recaudar unos 167 millones de pesos de la posible venta de 27 propiedades, pues solo se vendieron nueve. No será fácil esa venta porque quien invierte su dinero, si bien pudiera obtener una ganga, sabe del riesgo de su inversión al adquirir una propiedad devenida de la incautación a fuerzas cuya letalidad es de sobra conocida.