Pese a que la secretaria de gobernación, Olga Sánchez, ha opinado que el adefesio legislativo de Baja California que amplía de dos a cinco el periodo de gobernador es inconstitucional, y que el coordinador de la fracción morenista del senado Ricardo Monreal exhortó al Congreso de ese estado a dejar sin efecto la alocada propuesta, el gobernador electo, beneficiado por la misma, exige que “el centro (del país) respete las decisiones de los 21 legisladores que tomaron la decisión”. Y no es para menos, si atendemos al fuerte rumor que cruza los aires peninsulares sobre “que se pudo dar un millón de dólares por voto, por cada uno de los legisladores, esto a propia voz del presidente del Congreso estatal”, según dice Ángel Ávila, dirigente perredista en aquel estado.