Una de las razones por las cuales se producen ineficiencias y falta de controles en el Sector Salud es debido a que los Secretarios del Ramo han adoptado la cómoda e irresponsable disposición de delegar en el responsable administrativo la aplicación de los recursos financieros sin vigilar su correcta orientación, de tal manera que en no pocas ocasiones se privilegian gastos que nada tienen que ver con la salud. En la estructura de la Secretaría de Salud, obesa, por cierto, debajo del titular se encuentra un responsable de los servicios de salud, a cuyo cargo está la coordinación con los hospitales, y el área administrativa, encargada de la aplicación de miles de los millones de pesos presupuestados para ese sector, pero el secretario Ramos Alor declare que dejará el asunto de la contratación directa de la empresa Abisalud al área administrativa y la jurídica: “Lo digo con todo respeto, es el departamento jurídico y la administración; yo esta parte no (el contrato con Abisalud), lo mío es salud”. Y se equivoca, lo suyo es asumir el cargo de Secretario de Salud, porque cuando cobra el sueldo es completo, no lo reparte con sus subordinados, que a su vez también reciben lo suyo… y algo más.